Peralada acoge esta fortaleza, el castillo de Peralada, cubierta de hiedra, de la cual ya encontramos referencias documentadas en 1285, aunque resulta bastante difícil determinar la fecha exacta en la que se construyó.
El castillo de Peralada se encuentra situado en el casco urbano de esta localidad en la provincia de Gerona. Es propiedad de la familia Mateu. El castillo-palacio de Peralada es conocido mundialmente por el festival de Música Clásica que se celebra en sus instalaciones.
También destaca su famosa bodega, donde se realizan excelentes cavas y vinos, y su museo-biblioteca. Gracias a don Miguel Mateu i Pla que compró el castillo en 1923 se completaron las colecciones de arte existentes en el castillo. Destacan en la biblioteca los más de 70.000 volúmenes con los que cuenta, entre ellos son especialmente reseñables la biblioteca cervantina que cuenta con más de 1.000 ediciones diferentes, 1.200 manuscritos y un centenar de Biblias entre las que destaca la políglota de Felipe II. En la colección de vidrio se encuentra una lámpara gótica única en Cataluña y numerosos vidrios catalanes renacentistas.
A partir del siglo XIV empezaron a realizarse las primeras reformas en el castillo de Peralada, por lo que presenta varios estilos arquitectónicos que se pueden apreciar en los diferentes elementos de la fortaleza.
Las torres y el muro de la cara norte son de época medieval y la de la fachada principal es de época renacentista. Las últimas modificaciones fueron realizadas por la familia del actual propietario tras la compra y afectaron al convento del Carmen de Peralada erigido en 1293 de estilo gótico catalán. En su claustro se conservan los osarios medievales de linajes catalanes de gran relavancia como los Rocabertí, Avinyó, Barutell, Darníus, Llimós y Ortall entre otros.
De todo el conjunto destacan en la fachada principal las dos grandes torres datadas en el siglo XVII de forma cilíndrica en la parte exterior y achaflanadas en la parte interior. Actualmente están totalmente cubiertas por la hiedra.
Los distintos linajes que han sido propietarios del castillo de Peralada comenzaron con el segundo hijo de los condes de Empúries, Berenguer, que inicia la dinastía de los vizcondes de Peralada, siendo su hijo Dalmau Berenguer quien lo empezó a utilizar entre 1099 y 1137.